Reflexión
Sólo nos fijamos en las hojas en otoño, cuando caen. Y si seguimos por el camino y miramos al cielo, nos parece más gris. Algunos campos vuelven a verdear, a retomar ese color vivo que les trajo la primavera y que el verano quemó. Y los árboles que mudan sus copas quedan al descubierto, para que el crudo invierno no hiele la savia de sus nérveas hojas. Sólo los cipreses del cementerio siguen perennes, erguidos hacia el embaldosado cielo, como queriéndose abrir paso entre la manta nubosa que nos oculta el resto del universo. Sólo vemos las cosas cuando ocurren, cuando estamos en ellas. Da igual que sea algo inesperado o que se repita a menudo, cíclicamente, como las estaciones. Sólo vivimos y experimentamos las verdaderas sensaciones de un suceso única y exclusivamente cuando ocurre.
2 comentarios
Nacho -
En cuanto a lo más literario me sobran algunas "Y" de inicio de frase, que habría que buscar sustituir de alguna forma y también chirrían adjetivos como "nérveas" algo extraño y qe en todo caso siempre deberían ir después del sustantivo no antes, suena mejor en castellano. Decimos ojos azules mejor que azules ojos.
Ya perdonarás por enrollarme. No hace falta que te insista en que me encanta tu estilo de gasa y transparencias.
marinera -
por mi no habria ni uno los talaría de raiz
un besoooooooooo